Lluís Hortalà encuentra en el Versalles dieciochesco y en la crisis del Antiguo Régimen los mejores casos para examinar los artificios que requiere el poder para su consolidación.
La vanidad de Marie Antoniette y de Madame du Barry, así como la incidencia que tuvieron sus disputas personales en la diplomacia Europea del época, fue objeto de la anterior exposición individual de Hortalà, “Il y a bien du monde aujord’hui a Versailles” (RocioSantaCruz, 2016).
Ahora, con “Encore un moment, monsieur le bourreau, encore un moment”, Hortalà presenta una tragicomedia Rococó en tres actos, en los que, junto a las cortesanas, se suman nuevos actores, que conviven en un régimen temporal extrañamente simultáneo: el acto primero remite al arte suntuoso y de como éste encontró, con la llegada del museo, la guillotina que acabó con su mundo. El acto segundo se refiere a la estrategia ornamental y de como el engaño al ojo es una muestra de la más profunda sinceridad entre los objetos y los humanos. Por último, se asoma aquí también el artificio, en un tercer acto en donde éste se manifiesta en su literalidad, despojado y hecho trizas. Se trata de una suerte de grado cero del artificio que encuentra su origen tanto al principio como al final de este espectáculo.
Lluís Hortalà, Olot, España, 1959. Vive y trabaja en Barcelona, España. A lo largo de su carrera ha expuesto tanto en galerías y museos o fundaciones europeas (Le Carré, Nîmes, Delfina Studio, Londres, BombasGens Centre D’Art, CDAN, Arts Santa Mónica, Fundaçâo Calouste Gulbenkian… ). Sus obras forman parte de importantes colecciones nacionales e internacionales: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Madrid, España;Colección Fundació “la Caixa”, Barcelona, España; Colección Artium, Vitoria, España. Col·lección Per Amor l’Art. Valencia, España; Fundación Marcelino Botín. Santander, España; Trust Fundation. Washington DC, USA; Colección Fundació Banc de Sabadell. Barcelona, España.
Oriol Fontdevila